No son rompedores, no crean tendencias, no son líderes de opinión...ni falta que les hace. Los italianos The Stompcrash nos ofrecen un trabajo sólido, repleto de interés y de canciones más que interesantes, directas al oído y al corazón y que son ideales para pasar un buen rato oyendo música.
"Love from hell" es un trabajo de The Stompcrash editado en Swiss Dark Nights (Ref: SDNR0012) en Abril de 2014. Interpretado por Christian Celsi como cantante y guitarrista & Daniela Palermo en los teclados & Diego Itris a la batería desde Italia y navega entre los estilos Gothic Rock & Darkwave y tiene una duración de 44,11 minutos. Enlaces Relacionados:The Stompcrash & Swiss Dark Nights Valoración: 8 sobre 10
Son ya doce años los que, a día de hoy, se cuentan en la carrera musical de esta banda italiana de darkwave que vió la luz por primera vez en Milán, un lejano día del año 2002. Cuenta su biografía que la inspiración primera que alumbró el nacimiento de este proyecto fueron las historias imaginadas por los grandes iconos de la literatura de terror, como los omnipresentes Howard Philips Lovecraft o Edgar Allan Poe, así como por otros autores no vinculados con el género pero generalmente admirados por los seguidores del mismo, como es el caso de Franz Kafka. No es que se trate de unas fuentes de inspiración muy originales precisamente, pero no siempre la originalidad trae consigo la calidad y el interés.
La música de The Stompcrash, para quien no lo conozca a pesar de su ya larga historia y carrera, se mueve por los difusos e imprecisos terrenos del darkwave, lo que les permite incluir en sus canciones un elevado número de elementos de distintos subgéneros de la música oscura; teclados, guitarras, programaciones, ritmos a veces más gothic rock y a veces más enfocados hacia las pistas de baile…en fin, una alegre zarabanda de elementos dispares los cuales, si no se mezclan en su justa medida, pueden hacer naufragar un disco lleno de buenas intenciones. Afortunadamente, este no es el caso de “Love from hell”, un trabajo en el que esas buenas intenciones cristalizan en once sólidas realidades merced a la sabiduría, a la elegancia y al buen gusto con que los miembros de The Stompcrash mezclan todas sus influencias y sus intereses musicales.
Para mí, las canciones más interesantes están al principio del disco. Sobre todo me ha gustado la primera, la sensacional ‘Love from hell’, una canción de cuyo potencial no estoy convencido solamente yo, sino también la propia banda, que la ha elegido como una de las cartas de presentación del disco y ha rodado un estupendo videoclip para promocionarla. Sus ritmos ágiles e ideales para las pistas de baile más selectas, así como sus pegadizas melodías y sus excelentes arreglos, hacen de ella un tema obligatorio en los set lists de los djs centrados en el darkwave. Los ritmos y ambientes de ‘Jack’, también ágiles pero a la vez más sinuosos y oscuros, hacen de este corte otro de los más brillantes de "Love from hell", el cual además posee uno de los estribillos más emotivos de los aquí incluidos.
A partir de aquí el disco deja de sorprender para simplemente gustar o agradar. Las canciones restantes son excelentes, pero ninguna llega a impactar tanto como las dos mencionadas. Esa falta de sorpresa no es óbice para que podamos disfrutar de canciones como el sinuoso medio tiempo ‘Follow you’, adornado con otro estupendo estribillo, o las elegantes ‘Duality’, que cuenta con la intervención de Andrew Birch, de la banda The Last Cry, ‘Tonight’ o, sobre todo, ‘Bloodnever’, quizá la más brillante de las tres que acabo de mencionar.
Estoy firmemente convencido que no es imprescindible que, para disfrutar con una obra artística, esta tenga que ser rompedora, novedosa o una puñetera obra maestra; a veces esto incluso puede llegar a ser un freno o una carga. Para ser sinceros, este “Love from hell” quizá no pase a la historia de la música oscura pero, a buen seguro, os hará pasar un buen rato escuchándolo, que es en definitiva de lo que se trata y para lo que The Stompcrash se ha esforzado al crear los once cortes de este buen trabajo. Un esfuerzo que, sin duda, ha merecido la pena a tenor de los resultados