Nueva muestra del cine oriental de fantasmas, de reciente estreno aunque rodada en el momento de máximo apogeo de ese tipo de films. Una sorpresa que por fin llega a las pantallas y que no decepcionará a los seguidores del género.
"Shutter" dirigida por Parkpoom Wongpoom & Banjong Pisanthanakun con la distribución de Manga Films y presentada 2004. Interpretada por Ananada Everingham como Tun & Natthaweeranuch Thongmee como Jane & Achita Sikamana como Natre & Unnop Chanpaibool como Tonn desde Thailandia y pertenece al género Terror , tiene una duración de 97 minutos. Enlaces Relacionados:Sutter & Manga Films Valoración: 7.5 sobre 10
Una joven pareja , Tun y Jane, vuelve de la boda de un amigo cuando aparece de la nada una joven a la que atropellan, dándose después a la fuga. A continuación, los dos jóvenes, que se dedican a la fotografía, empiezan a descubrir misteriosas sombras y reflejos en sus trabajos, a la vez que las apariciones del fantasma de la joven muerta (Natre) comienzan a provocar terribles sucesos en su entorno más cercano. Esa es la linea argumental de "Shutter", una producción thailandesa de 2004 que, después de pasar con éxito por diferentes certámenes, se estrena en Europa.
Nada demasiado novedoso dentro del cine oriental de fantasmas, de hecho el diseño de producción y el personaje del fantasma se parecen sospechosamente a los de "La Maldición", y además los directores no se resisten a casi plagiar un par de los muchos buenos momentos que tenía aquel film en uno de los finales de "Shutter", algo (lo de tener varios finales) también habitual en el último cine de terror. Incluso el tema de las fotografías como forma de "comunicación" entre las distintas esferas de la realidad aparecía en uno de los episodios de "La Maldición".
Así que en principio parece una película más, con la historia de siempre y el estilo de siempre. Sin embargo "Shutter" propone ciertas, no diría novedades, pero sí variaciones, tanto temáticas como formales. Por ejemplo, y sin entrar a destrozar el argumento (tampoco importaría mucho, no se trata de una película con sorpresa ni nada parecido), el que en este caso la relación entre los personajes está perfectamente definida en espacio y tiempo, además de que los que sufren las iras del fantasma están directamente relacionados con su trágico pasado, mientras que, en general, en los demás films la relación era completamente aleatoria. O el excelente final y su elegantísima evolución en diferentes y sutiles insertos a lo largo de la historia.
Por otro lado, a nivel formal, los directores abandonan la planificación estática habitual, casi sin movimientos de cámara, para emplear un formato más televisivo, menos clásico, usando y abusando del primer plano a lo largo de toda la película. Además, el construir toda la historia alrededor del hecho de que los protagonistas son fotógrafos da la oportunidad de trabajar con imágenes muy poderosas y muy sugerentes: los abundantes planos con espejos, la excelente secuencia en la que el fantasma se vale de una cámara de fotos para comunicarse con una de las protagonistas o la parte final, donde Tun utiliza una polaroid para tratar de localizar a su enemiga antes de descubir lo que en realidad está pasando, también a través de una fotografía. O un par de momentos "a laShyamalan" realmente brillantes.
Destacar también el empleo del sonido como elemento turbador, algo también bastante habitual en este tipo de cine y que aquí se ve acompañado de una banda sonora de lo más industrial, casi dark ambient en muchos momentos del film. Y no necesariamente dedicada a preparar al espectador para los sustos de rigor con los habituales crescendos...
En definitiva, y como decía al principio, nada nuevo, porque casi todo los elementos que aparece en "Shutter" ya habían sido utilizado con anterioridad. Pero, dejando aparte un par de detalles de guión mejorables, es de agradecer la concisión y sobre todo la coherencia en el desarrollo de la idea, simple pero muy efectiva, y sobre todo muy bien puesta en escena, con un estilo igual de simple pero también igual de coherente con esa línea argumental planteada desde el principio. Una rareza en estos días donde las historias van por un lado y la realización por otro completamente diferente, y una sorpresa muy agradable.
