Después de nada menos que diecisiete años de silencio, Orchestral Maneuvres in the Dark, más conocidos como OMD, regresan con una fuerza y una vitalidad como la de sus primeros y añorados tiempos.
"History of Modern" es un trabajo de OMD editado en 100% records (Ref: BNL001CD) en Septiembre de 2010. Interpretado por Andy McCluskey como cantante, bajista y teclista & Paul Humphreys como cantante y teclista & Malcolm Holmes en la batería & Martin Cooper en los teclados, el saxo y el bajo desde Gran Bretaña y se centra en el estilo Synthpop y tiene una duración de 58 minutos. Enlaces Relacionados:OMD & OMD MySpace & 100% records Valoración: 8.75 sobre 10
Pues sí, después de trescientos y pico artículos escritos para esta vuestra página web, esta es la primera vez que me toca escribir sobre alguien que conoce mi madre. Y es que, aunque pueda parecer difícil de entender para alguien que no vivió aquellos años, esta banda consiguió un altísimo, altísimo, altísimo nivel de popularidad a comienzos de los ochenta. Canciones como las míticas ‘Enola gay’, ‘Maid of Orleans’ o ‘Souvenir’sonaban continuamenteen todas las emisoras de radio, así como sus respectivos videoclips eran emitidos por los diferentes canales de televisión y discos como “Architecture and morality” alcanzaban los primeros puestos de las listas de ventas en toda Europa, España incluida.Esto llevó a que OMD fuera uno de los grupos más conocidos por personas que, como mi madre, no sienten ningún interés por música que no esté hecha por José Luis Perales, Engelbert Humperdink o Paloma San Basilio.
Aunque va a ser muy difícil que alcancen con este disco el nivel de popularidad tan brutal que tuvieron hace casi treinta años, entre otras cosas porque no están apoyados por una multinacional, lo cierto es que la OMD ha regresado por la puerta grande, con un disco absolutamente brillante, muy superior a buena parte de lo que podríamos denominar como su “producción clásica”. La brillante energía de las canciones y la variedad de las mismas, unidas a la fastuosidad de los arreglos y a las vocalizaciones, que no parecen haber cambiado ni un ápice en todo este tiempo, hacen de “History of Modern” un trabajo increible, genial, maravilloso y totalmente recomendable.
Resulta significativo comprobar que para este nuevo trabajo haya regresado la otra mitad de la OMD, Paul Humphreys, que abandonó la formación a finales de los años ochenta, y que junto al incombustible Andy McCluskey fue responsable de la mayoría de esos grandes éxitos que se encuentran en la memoria colectiva de todos aquellos que prestaron atención a la radio de comienzos de los ochenta. Pero no es este el único guiño al pasado glorioso de la OMD que se hace en “History of Modern”; también se ha decidido rescatar una canción de los comienzos de la banda que en su día fue descartada por las similitudes sonoras que tiene en algunos momentos con el clasicazo ‘Enola Gay’. Se trata del vibrante ‘Sister Mary says’, un tema con un sonido optimista y luminoso como pocos, toda una explosión de energía y dinamismo que nos empuja irremisiblemente a salir de esa oscura caverna en la que tanto nos gusta estar.
¿Más guiños al pasado? Si, por supuesto. ‘Bondage of fate’, ‘New Holy Ground’ o ‘The Right Side’ podrían perfectamente haber salido de cualquiera de los discos de la banda hasta el “Dazzle Ships” ( siempre con matices ), mientras que por ejemplo ‘New babies, new toys’encajaríamuy bienen “The Pacific Age”, por ejemplo. Por su parte ‘If you want it’ parece haberse escapado de los discos que sacó Andy McCluskey en solitario bajo el nombre de la OMD.
Pero este disco no se nutre exclusivamente del pasado, ni mucho menos. También experimenta con nuevos ritmos, como la muy negroide ‘Pulse’,que suenacomo si en la Motown de repente se hubiera desatado un inusitado interés por la música electrónica. Además podemos disfrutar defabulosos ejemplos de elegancia electrónica, como la muy bailable ‘History of Modern Part I’ o la electrizante ‘The Future, The Past and Forever After’, cuyos geniales arreglos le proporcionan una atmósfera que envuelve perfectamente su dinámico ritmo y que la convierten en mi canción favorita de todo el disco. Hay también una pequeña curiosidad que me gustaría mencionar, y es que el nombre de la canción ‘RFWK’ corresponde a lasiniciales de los nombresde los cuatro miembros de Kraftwerk.
Aunque seguramente haya más, yo he conocido dos ediciones diferentes de este disco. Una es la clásica edición normal y la otra es en caja de cartón la cual contiene, además del disco, un dvd con entrevistas y otros extras. No sé si seguirá igual, pero yo he visto en unos grandes almacenes del centro de Madrid, dedicados en exclusiva a discos, libros, videojuegos, etc, como esta interesante edición especial era puesta a la venta a un precio realmente asequible, más barato incluso que un cd normal. Tanto si tenéis acceso a esa oferta como si no, el coste económico no puede ser una excusa para no hacerse con un ejemplar de este disco genial, maravilloso y que da sopas con honda a muchas bandas de nuevo cuño, en cuyas tristes carreras musicales apenas puede encontrarse una pizca del talento del que este disco está más que sobrado.
Pues sí, después de trescientos y pico artículos escritos para esta vuestra página web, esta es la primera vez que me toca escribir sobre alguien que conoce mi madre. Y es que, aunque pueda parecer difícil de entender para alguien que no vivió aquellos años, esta banda consiguió un altísimo, altísimo, altísimo nivel de popularidad a comienzos de los ochenta. Canciones como las míticas ‘
¿Más guiños al pasado? Si, por supuesto. ‘
