Segunda y magnífica incursión de la Hammer en el género del terror, la cual daría comienzo a una serie de siete películas con mayor o menor calidad, pero siempre apasionantes y merecedoras de atención para cualquier aficionado al género.
"Horror of Dracula" dirigida por Terence Fisher con la distribución de Impulso Records y presentada 1958. Interpretada por Christopher Lee como Drácula & Peter Cushing como Van Helsing & Michael Gough como Arthur Holmwood & Melissa Stribling como Mina Holmwood & Carol Marsh como Lucy Holmwood & John Van Eyssen como Jonathan Harker & Valerie Gaunt como vampira & Olga Dickie como Gerda & Janine Faye como Tania desde Gran Bretaña y pertenece al género Terror , tiene una duración de 78 minutos. Enlace Relacionado:Impulso Records Valoración: 9 sobre 10
Jonathan Harkerllega al castillo de Drácula, situado en un paraje de gran belleza en el cual, sin embargo, no se escucha el trino de ningún pájaro. Cuando llega la noche, Harker conocerá a una mujer que le pide desesperadamente que la saque del castillo, la cual saldrá huyendo al intuir la presencia de Drácula en la habitación. El conde se presentará ante su invitado en una escena memorable y le acompañará a su habitación, donde poco después sabremos que Harker, un supuesto bibliotecario que ha venido a ordenar la biblioteca del vampiro, tiene como objetivo acabar con la existencia de éste.
La noche siguiente Harkervuelve a encontrarse con la mujer, una vampira, quien le morderá en el cuello. El hecho es interrumpido por un terrorífico Drácula de ojos enrojecidos y boca chorreante de sangre, quien luchará con Harker hasta que éste se desmaye. A la mañana siguiente, el supuesto bibliotecario encontrará la cripta donde descansan el conde y la mujer. Mientras la destruye a ella cae la noche y Drácula se levanta de su tumba, atrapando a Harker en la cripta y acabando con él.
Más tarde, a la posada del lugar llega el doctor Van Helsingpreguntando por su amigo Jonathan Harker. Allí le entregarán el diario de éste, que había sido escondido por su propietario en el exterior del castillo de Drácula. Van Helsingse dirige hasta allí y acaba con Harker, ahora vampiro, no sin antes haber presenciado como el ataúd de Drácula abandona el lugar en un carruaje tirado por caballos.
Van Helsing acude a visitar a Arthur Holmwood, hermano de Lucy, la prometida de Harker, para informarle de su muerte a él y a su esposa, Mina, los cuales se resisten a contarle el hecho a la propia Lucy. Ésta lleva tiempo siendo visitada por Drácula, hasta que finalmente fallece y resucita convertida en una cruel vampira, cuyo primer objetivo es la hija de la criada de su casa. Van Helsingy Arthur llegan a tiempo de impedirlo y acaban con Lucy, dando inicio después a una frenética búsqueda del ataúd de Drácula, ignorantes de que dicho ataúd, gracias a una astuta estratagema del vampiro, está en la propia casa de los Holmwood y que Mina es ahora la nueva víctima del conde. Al final Drácula es descubierto y huye a su castillo, siendo perseguido muy de cerca por Van Helsing, quien finalmente le dará alcance y, en una escena antológica, luchará con él hasta destruirlo.
Tal argumento es lo que podemos encontrar en la primera de las siete películas que la productora británica Hammer Films dedicaría a la figura del conde Drácula. Dado el éxito de taquilla que el año anterior obtuvo La maldición de Frankenstein, los ejecutivos del estudio se decidieron a seguir por la senda abierta por esa película y seguir produciendo largometrajes inspirados en los grandes iconos del terror. Tras haber hecho una película basada en el personaje creado por Mary Wollstonecraft Shelley, era mas ó menos obvio que el siguiente personaje elegido iba a ser el majestuoso vampiro creado por la imaginación de Bram Stoker.
Tratando de asegurar el éxito del nuevo film, la Hammerquiso reunir al mismo equipo técnico y artístico que realizó La maldición de Frankestein, es decir, los actores Peter Cushing y Christopher Lee, el director Terence Fisher, el decorador Bernard Robinson, el músico James Bernard y el guionista Jimmy Sangster. La estrategia surtió pleno efecto, creando entre todos ellos una de las mejores películas de terror no sólo de la Hammer, sino de todo el cine del siglo XX. Las interpretaciones de los actores principales, la brillante dirección artística, el rabioso technicolor y el fuerte erotismo para la época, la briosa y magistral música, entre otros elementos, así lo atestiguan.
Para entender el valor de esta película hay que situarse en la época de su estreno, el año 1958. Hasta que el año anterior irrumpiera en las pantallas La maldición de Frankenstein, las películas de terror debían ser en blanco y negro, nunca en el brillante y chillón technicolor en el que estaban rodadas tanto ésta como Horror of Dracula. Además, elementos como la sangre y el sexo debían ser convenientemente ocultados por oportunas/inoportunas elipsis temporales o fundidos de la cámara a negro. Nada de eso se puede ver en esta película, en la que la sangre gotea de la boca del conde vampiro con profusión y en la que la vampira que vive con él en su castillo luce un sugerente y vaporoso vestido de gran escote y con una abertura lateral que le llega prácticamente a las caderas. Además, podemos ver como las víctimas de Drácula, Lucy y Mina, se sienten poseídas por un ansia muy próxima a la plena excitacion sexual justo antes de ser mordidas por el vampiro. Tales elementos eran inéditos en el cine de terror de la época y le costaron al film la calificación de X por parte de la censura británica, lo que no le impidió revalidar el éxito de La maldición de Frankestein tanto en Gran Bretaña como fuera de ella.
Desde el comienzo de la película, con ese maravilloso plano en el que la cámara, apoyada por la grandiosa banda sonora, nos lleva desde el exterior del castillo hasta la cripta donde descansa el ataúd de Drácula, nos encontramos ante uno de los mejores ejemplos de aprovechamiento del escaso presupuesto del que solían "disfrutar" los films de la Hammer. Gracias a ese maravilloso manejo del poco dinero disponible por parte del director artístico Bernard Robinson, tenemos decorados tan brillantes y suntuosos como la biblioteca y el salón del conde Drácula, realzados por esa brillante fotografía en rabioso technicolor a la que ya he hecho mención. Allí donde la magia de Bernard Robinson terminaba entraba en juego la imaginación del guionista Jimmy Sangster para justificar la falta de presupuesto, como en esa conversación en la que Arthur Holmwood le comenta a Van Helsing que el tenía entendido que los vampiros se transformaban en murciélagos ( un efecto especial que debía ser bastante costoso ) a lo que Van Helsing responde, muy seguro de sí mismo, que eso es "un error muy corriente" y que las investigaciones sobre los vampiros aún no han podido aclarar muchas de las supersticiones que sobre ellos existen.
La película tiene apenas nada que ver en su argumento con la novela de Bram Stoker, excepto en unos cuantos y minúsculos detalles. Aunque nombres como Jonathan Harker, el doctor Seward, Arthur Holmwood, Abraham Van Helsing o el mismo Drácula se mantienen, no lo hacen así ni sus actitudes ni sus hechos. Algo que sí se mantiene de la novela es la costumbre por parte de Van Helsing de grabar su diario en fonográfo. Para evitar posibles problemas con los herederos de Bram Stoker, la localización geográfica de la película se mantiene deliberadamente en una imprecisa y nebulosa zona de la Europa Central.
Escenas gloriosas hay muchas pero, además del ya mencionado comienzo, con ese genial movimiento de la cámara, me quedo con el momento en que Drácula aparece por primera vez, envuelto en sombras en lo alto deuna escalera y arropado por el impactante tema musical creado por James Bernard. También es maravillosa la escena en que Drácula interrumpe a la vampira cuando está chupándole la sangre a Jonathan Harker, con esa imagen de un Christopher Lee de ojos enrojecidos y boca chorreante de sangre que ha llegado a hacerse inmortal, dando inicio a una furiosa lucha entre vampiros. También es absolutamente brillante el final, con una pelea maravillosamente coreografiada entre Dráculay Van Helsing, apoyada una vez más por la monumental música de James Bernard.
La edición en dvd aquí comentada es bastante sencillita, sin apenas extras ( ficha técnica, artística y galería fotográfica, muy exiguas todas ellas ). Los idiomas disponibles son castellano e inglés con subtítulos en castellano y la zona regional es la 2. Los extras no son precisamente como para tirar cohetes pero en este caso creo que merece la pena disculpar ese hecho, pues la película merece la pena, aunque no tuviera ningún extra.
La noche siguiente 
Tratando de asegurar el éxito del nuevo film, la 
La película tiene apenas nada que ver en su argumento con la novela de 