La banda sueca de trash metal Darkane, en colaboración con el mismísimo Satanás, lanza su quinto opus, un conjunto de temas intensos, potentes y brutales, inspirados por las potencias infernales.
"Demonic Art" es un trabajo de Darkane editado en Massacre Records (Ref: MAS CD0613) en Octubre de 2008. Interpretado por Jens Broman como cantante & Christofer Malmström en la guitarra & Klas Ideberg en la guitarra & Jörgen Löfberg al bajo & Peter Wildoer como batería desde Suecia y navega entre los estilos Death Metal & Trash Metal y tiene una duración de 46,06 minutos. Enlaces Relacionados:Darkane & Massacre Records Valoración: 7 sobre 10
Lo primero que llama la atención de este disco es su espectacular portada, muy en la tradición de lo que Darkane ha ofrecido desde sus comienzos. Tanto ella como el logo de la banda no dan una idea clara de lo que espera al oyente más desprevenido cuando empiece a escuchar "Demonic Art". La apocalíptica elegancia de la cubierta nos hace pensar en un disco de metal, sí, pero con toques góticos; sin embargo, la música enseguida se encarga de deshacer esta impresión, pues casi desde el primer momento una continua ráfaga de intenso y brutal trash metal nos abofetea la cara y los oídos.
Desde sus inicios, allá por 1998 y como resultado de la disolución de la banda Agretator, Darkane han ofrecido un sonido agresivo y técnico a la vez. Sus constantes cambios de formación no han hecho sino ir perfeccionando esta línea de brutalidad trufada de abundantes elementos melódicos. Dichos elementos contribuyen a aliviar la intensidad sonora que recorre el álbum de principio a fin; puntuales intervenciones de los teclados, variedad melódica en los estribillos, escasas pero fulgurantes intervenciones de elementos de corte orquestal... todo ello da un aire más elaborado y consistente a lo que en principio podría parecer una simple descarga de furia primitiva.
Quisiera destacar el primer corte, una brillante combinación de elementos metaleros con un inquietante fondo orquestal oscuro que sirve de aterrador portal para el pandemonium que está por venir. Ya con la segunda canción un permanente bombardeo de ritmos aceleradísimos y de una voz que transmite toda la rabia y la furia del infierno nos acosa y nos acorrala contra un rincón del que no podemos escapar. Pero, al igual que ocurre con casi todos los cortes de "Demonic Art", hay interesantes interludios melódicos en los que los miembros de la banda pueden demostrar su pericia con sus respectivos instrumentos.
El tema que da título al disco es todo un muestrario de la habilidad de Darkane; magníficos teclados introductorios que sirven para crear atmósfera, diabólica habilidad instrumental, fascinante variedad de melodías que hacen pensar que estamos ante mil canciones diferentes en una sola y derroche de facultades por parte del cantante, que demuestra aquí que su variedad de registros va más allá del grito desgarrado y furioso típico del trash metal. En esta misma línea se encuentran cortes como 'Absolution' o 'Execution', este último con una brillante introducción a base de teclados y de un impresionante solo de guitarra.
El resto de "Demonic Art" transcurre por los mismos parámetros que ya he apuntado; brutalidad y melodía a raudales, dirigida por ritmos veloces y rápidos la mayor parte del tiempo pero que a veces se ven sustituidos por ritmos más intensos y pesados o por otros más ligeros y dinámicos. En este sentido os recomiendo escuchar la demoledora 'Soul survivor', otro resumen de las habilidades de Darkane; rapidez, brutalidad, melodía, habilidad instrumental y vocal y atmósfera.
Massacre Records ha lanzado para la ocasión dos ediciones diferentes de "Demonic Art", la de caja normal con once temas y un digipack con un tema extra, 'Wrath connection', en la línea del resto de cortes. Os hagáis con la edición que os hagáis, vais a poder experimentar en vuestras carnes toda una experiencia de intensidad y furia demoníaca, para la que estos muchachos suecos seguro que han contado con la colaboración de algún demonio de los infernos ¿ Quizá del mismísimo Satanás ?.