Imágenes de bosques inexplorados y de naturaleza bella y salvaje es lo que nos trae el primer disco de este proyecto alemán de black metal ultra melódico y repleto de majestuosos y envolventes arreglos.
"Wanderugen durch den Daemmerwald" es un trabajo de Aethernaeum editado en Einheit Produktionen (Ref: EP 040) en 2013. Interpretado por Alexander Paul Blake como cantante, bajista y teclista & Marco Eckstein a la guitarra & Motte a la guitarra & Markus Freitag en el cello & Hendrik Wodynski como batería desde Alemania y se centra en el estilo Black Metal y tiene una duración de 61,30 minutos. Enlaces Relacionados:Aethernaeum & Einheit Produktionen Valoración: 9 sobre 10
Hay veces en que uno compra un disco sin tener ni idea de lo que se va a encontrar dentro, llevado por un irrefrenable impulso que le obliga a hacerse con él, un impulso provocado por no se sabe muy bien qué pero que sin embargo es avasallador, machacón e irresistible y sólo cesa cuando nos hacemos con el disco en cuestión, sin importar cual es el precio marcado y si éste hace mucho, poco o ningún daño a nuestra maltrecha economía. Eso fue exactamente lo que me ocurrió hace ya algún tiempo con este disco de los alemanes Aethernaeum. Algo en él me provocó el impulso de comprarlo ya, sin saber de qué palo iban ( bueno, algo sí intuía, estaba en una tienda de discos especializada en metal, por lo que debía ser de metal ).
Estas aventuras locas hay veces que no salen bien, pero hay otras en que sí y debo decir que esta ha sido una de esas ocasiones en que ese impulso salvaje de compra ha funcionado bien, bueno, más que bien diría yo. El primer disco de esta banda ( banda desde hace más bien poco, pues el disco fue compuesto y grabado casi en su totalidad por el cantante ) es una auténtica maravilla, una delicia que combina con singular maestría el black metal más melódico con elementos inspirados en la música folk y en la naturaleza, vehiculados a través de unos sensacionales teclados, unos maravillosos y expresivos cello y violín, unas preciosas guitarras acústicas y una atmósfera general de elegancia y majestuosidad que no desaparece ni siquiera en los momentos ( no muchos ) en que el black metal más intenso y rápido se apodera del ambiente.
El disco se estructura en torno a nueve temas, de los cuales tres son breves y bellísimos instrumentales sin rastro de metal en ellos y seis son largas e intensas piezas de black metal generalmente a medio tiempo, repleto de variaciones, arreglos y melodías de una belleza y una fuerza sin parangón en bandas similares. Como ejemplo más ilustrativo del estilo de Aethernaeum tenemos el corte que abre el cd, el sensacional ‘Auf den Nebelfeldern’, una obra maestra en su género y un perfecto transmisor de mil emociones y sentimientos a medio camino entre la tristeza, la furia, la belleza y la melancolía. Su variedad de melodías, ritmos y arreglos hacen que sus casi doce minutos de duración se hagan cortos y que nos quedemos con ganas de más cuando termina; con ganas de más pasión, con ganas de más intensidad, con ganas de más de esas oscuras melodías y de esos coros y voces de los que está repleto este auténtico temazo.
El resto de las canciones largas siguen patrones muy parecidos, pasando constantemente y de forma muy bien conseguida de la expresiva tristeza del violín o del cello a las cabalgadas blackmetaleras, todo ello con una elegancia, un buen gusto y un sentido de la melodía y de la majestuosidad realmente únicos. Prueba de ello son temas tan redondos como ‘Sonnentor’, un monumental medio tiempo de enorme fuerza melódica, intensidad guitarrera y espectaculares y envolventes arreglos o ‘Tanz der Sturmgeister’, con un envolvente y siniestro comienzo y un desarrollo a la altura del resto del disco.
En cuanto a los temas instrumentales la única y gran pega que les puedo poner es su brevísima duración, pues ninguno de ellos pasa del minuto y medio. Realmente resulta asombroso como canciones como ‘Totenlichter’, con su delicada, cristalina y triste melodía, puedan contener tanta belleza en tan corto espacio de tiempo. También es conmovedora la suave melodía de guitarra y el coro femenino de ‘Deva’, otra pequeña joya que dignifica aún más un trabajo ya de por sí mucho, pero mucho más que digno, vamos, un trabajo realmente magnífico diría yo…
Espero que este primer disco de Aethernaeum no se quede en eso, en un primer disco, y que pronto podamos escuchar nuevo material de esta banda. Estoy seguro que cuando aparezca un nuevo cd conseguirá provocar mi asombro y mi emoción de forma mucho más intensa que lo ha hecho este “Wanderungen durch den Daemmerwald” ( y mira que este disco me ha gustado ¿eh? ). Además esta vez compraré sobre seguro, sin riesgos ni aventuras locas, sabiendo a ciencia cierta que me estoy haciendo con un grandísimo disco.
Hay veces en que uno compra un disco sin tener ni idea de lo que se va a encontrar dentro, llevado por un irrefrenable impulso que le obliga a hacerse con él, un impulso provocado por no se sabe muy bien qué pero que sin embargo es avasallador, machacón e irresistible y sólo cesa cuando nos hacemos con el disco en cuestión, sin importar cual es el precio marcado y si éste hace mucho, poco o ningún daño a nuestra maltrecha economía. Eso fue exactamente lo que me ocurrió hace ya algún tiempo con este disco de los alemanes 
El resto de las canciones largas siguen patrones muy parecidos, pasando constantemente y de forma muy bien conseguida de la expresiva tristeza del violín o del cello a las cabalgadas blackmetaleras, todo ello con una elegancia, un buen gusto y un sentido de la melodía y de la majestuosidad realmente únicos. Prueba de ello son temas tan redondos como ‘