Disco variado donde los haya, el último trabajo de los germanos Autumnblaze es todo un catálogo de casi todos los géneros que abarca el mundo del metal.
"Perdition diaries" es un trabajo de Autumnblaze editado en Prophecy Records (Ref: Pro 098) en Junio de 2009. Interpretado por Alvar Eldron como cantante y guitarrista & Arisjel a la batería y los coros desde Alemania y se centra en el estilo Dark Metal y tiene una duración de 42 minutos. Enlaces Relacionados:Autumnblaze & Prophecy Records Valoración: 8 sobre 10
Mira que llevo reseñados discos de metal para Mentenebre, pero hasta ahora no me había encontrado con ninguno tan sorprendente como "Perdition diaries", el último disco de los alemanes Autumnblaze. Y digo sorprendente debido a la fascinante variedad de subgéneros musicales que contiene, tan diferentes entre sí que, mientras se escucha el disco, se puede llegar a pensar que estamos oyendo varios distintos en uno sólo. Black metal, death metal, gothic metal, baladas, todo eso y más se puede encontrar en "Perdition diaries", un cd cuya excelente portada ya predispone a favor a quien se acerca a él.
Unas melódicas, a la vez que potentes, guitarras sirven de apertura al primer tema, 'Wir sind was wir sind', un corte en el que la voz se desgarra hasta el límite del dolor y de la angustia. El primer choque para el oyente llega con la segunda canción, 'Who are you', cuyo comienzo es extraordinariamente diferente; una dulce guitarra envuelve con delicadeza una voz limpia, triste y melancólica, a la que poco a poco se le van añadiendo unas guitarras rasgadas. En ciertos momentos la voz adquiere un mayor apasionamiento pero siempre enmarcada por un sentimiento de amargura más que notable.
'I had to burn this fucking kingdom' vuelve a sacudir nuestras mentes con una brutal descarga de black metal a base de afiladas guitarras y voz chillona; sin duda uno de los temas más potentes de todo el disco. 'Haughtiness and puerile dreams' tiene un cañero comienzo que después dejará paso a un tema pesado, arrastrado e intenso, atravesado ocasionalmente por ráfagas de avasalladora brutalidad. 'Brudermord' es más dinámico, con una melodía realmente pegadiza que tiene un agradecido punto épico y con una voz nuevamente desgarrada hasta límites muy elevados. Destaca aquí un melódico interludio a base de batería y un teclado muy setentero.
Con 'Empty house' volvemos a recuperar un ambiente de tristeza. La voz limpianoscontagia su melancolía en medio de una música relajante a base de una suave percusión y unos delicados punteos de guitarra. En cierto momento se añadenmás guitarras y la percusión adquiere un aire de épica y marcial elegía. Otro tema sorprendente y redondo. Por su parte 'Neugeburt' vuelve a retomar el sendero recorrido por canciones como 'Brudermord', a la que se parece bastante, pero añadiendo una todavía mayor carga melódica.
Pero la gran sorpresa de "Perdition diaries" llega con 'Ways', una balada a base de voz limpia, piano y alguna que otra aportación de flauta. Aquí es cuando realmente se piensa que estamos oyendo un disco diferente o que esta canción se ha colado aquí por error, pues es tan absolutamente inesperada, tan poco probable de escuchar en un disco de metal, que es inevitable plantearse que hace esta canción aquí. Su tierna melodía, su aire de dulce melancolía, sorprende absolutamente al oyente y le deja con la boca abierta y eso, a mi modo de ver, es todo un acierto, pues ya quedan pocas cosas que puedan sorprendernos.
El disco se cierra con 'The Forge' y 'Saviour', dos canciones que recuperan el tono metalero. De ellas, 'Saviour' de no ser por el desgarrado tono de la voz podría pasar por un tema de gothic metal, con sus épicas melodías de guitarra y con ese sensacional intermedio de guitarras limpias. Sin duda, una excelente manera de cerrar un disco asombrosamente variado en el que cualquier metalero ( y algún que otro gótico )podrá encontrar un tema a su gusto sea cual sea la tendencia que haya escogido.
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